Lori Meyers es una de esas bandas que ha sabido encontrar su sitio en el complejo y, en ocasiones, poco agradecido "mundillo" musical. Son de esa clase de músicos que engrandecen la palabra directo, que hipnotizan a las masas y que disco a disco rubrican la solidez de su proyecto. Hace un mes estuvieron presentando IMPRONTA, su último trabajo, en la Sala Apolo de Barcelona donde no sólo colgaron el cartel de sold out, si no que dieron un concierto magistral. Nuestra compañera Mlle
Rouge à lèvre estuvo allí y así lo vivió.
Viernes,
19 de abril, lleno absoluto para ver a Lori Meyers en la Sala Apolo. Presentaban IMPRONTA, del cual no faltó por sonar ni un solo tema, sin olvidar muchos de sus grandes hits
como “Mi Realidad”, “Religión” o “Aha”, canción que
dedicaron a una asistente de lujo, Lyona (Marta Puig) creadora de su
videoclip. Compaginaron
temas de saltar sin parar con otros en los que
Noni se adueñaba del teclado para deleitarnos con
algunas de sus preciosas baladas. Con “Despedirse”,
los seguidores de la banda demostraron saberse bien las
letras ya que Noni se saltó una estrofa y viendo la reacción del público soltó una risa que puso la nota de
humor al concierto. Otra
de las anécdotas que se pudo vivir en las primeras filas fue al ritmo de uno de sus nuevos temas “Emborracharme”, cuando Noni
cantó aquello de “Y
con las ganas que ahora tengo de follarte”
todas las chicas que allí nos encontrábamos rápidamente nos
acercamos lo máximo posible.…está
claro que Noni tiene magnetismo. Espectacular
fue su magnífico directo de “Luces de Neón”, con la que el público
no ceso de cantar. Al acabar la canción el
grupo volvió al backstage y regresar para el bis.
El público decidió que no les llamarían con las habituales “otra,
otra” o “Lori, Lori”, sino que al unísono toda la Sala Apolo
comenzó a cantar el estribillo de la canción con la que se había
marchado, emocionante forma de pedir que volvieran. Hacía
mucho que Barcelona no disfrutaba de un concierto de Lori Meyers y
podemos garantizar que toda la sala vibró a lo largo de todo el
espectáculo, dos horas de concierto que pasaron volando y que muchos
hubieran querido alargar otras dos horas, sin lugar a dudas fue uno
de esos conciertos que pese a sus más de 25 canciones dejó a sus
fieles seguidores con ganas de más.
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